Me fui con mis sobrinos a un
camping que esta situado en plena Sierra de Cádiz, era la primera vez que los
niños iban a una cabaña y la verdad que salieron encantados sobre todo por la
gran cantidad de animales salvajes que pudieron ver, y como se puede observar
en las fotografías.
Auque mi intención no era de
hacer astronomía, me llevé para estrenarlos mis olympus 8x40 que con un campo
de 8,2 grados, los había probado en ciudad para ver que tal estaban, y aunque
dentro del camping con las luces no era el mejor sitio donde probarlos, por lo
menos el sitio al estar en medio de la Sierra, era lo suficientemente oscuro
para disfrutar un rato esa noche.
Lo primero que hice fue comprobar
si tienen esos 8,2º que publicitan, busqué estrellas con esa separación y
asterismos que tuvieran esos 8º de campo y efectivamente, el campo que
publicita es correcto, además bien corregido casi hasta el borde, aunque le queda un poco para estar totalmente corregido.
Me fui a la zona Sur porque allí
era donde tenía menos efectos de las farolas en forma de chupachups (manía de
ponerlas), y me tiré un buen rato disfrutando de la zona de Sagitario y Scutum,
he leido algunas crónicas de otros compañeros con prismáticos de más campo, y
la verdad que es una gozada abarcar una gran cantidad de objetos a la vez,
acostumbrado a los 10x50 clásicos con menor campo y peor calidad, la
observación de la zona de la trifida y la laguna me gustó, pero lo que más me
llamó la atención esa la zona de M 24 y la zona de M 25 a parte de la zona del
Escudo.
Me fui por la zona de la percha,
y que quedé con las ganas de observar la zona de Cygnus que estaba mal situada
por las montañas y los albores.
Una zona que me encantó fue la
zona de Antares, y ver a M 4 en el campo rodeado de estrellas con un generoso
campo alrededor fue también una imagen que me hizo disfrutar un montón.
Por ultimo fotografíe a Júpiter y
Venus, y aunque todavía estaban lejos el uno del otro, ya se empezaban a
acercar, las fotos están realizadas con una cámara compacta y le he ajustado
sobre todo los niveles para evitar los efectos de las farolas.
Los niños y la familia disfrutó
de la naturaleza salvaje y tuvimos la suerte de ver unos cuantos muy cerca como
podéis ver en las fotos, y algunos más que no he subido, la cabaña una gozada
para volver, espero que os haya gustado la crónica.